Los cartílagos son un tipo de tejido, que forma parte del esqueleto y que tiene la propiedad de ser flexible. Cumplen la función específica de conectar los distintos huesos, pero además ayudan a amortiguar los golpes, previenen el desgaste óseo por rozamiento y permiten la movilización de las articulaciones.
Ya que son una parte fundamental de nuestro esqueleto, debemos prestarle atención y cuidar de ellos, a fin de prevenir su desgaste.
Los cartílagos, ¿cómo cuidarlos adecuadamente?
Para cuidar bien nuestros cartílagos, es vital que le proporcionemos a nuestro organismo una alimentación balanceada. Especialmente, debemos poner atención para estar seguros de estar consumiendo la cantidad de vitaminas que nuestro cuerpo requiere para funcionar adecuadamente.
A parte de la dieta, en ocasiones es necesario que tomemos algún suplemento vitamínico para fortalecer nuestro sistema. A continuación, te mostraremos las vitaminas más importantes que debes consumir si quieres fortalecer especialmente esta parte de tu cuerpo.
Vitamina A
Esta vitamina tiene grandes propiedades antioxidantes y colabora en la eliminación de los radicales libres; elementos que perjudican la salud de nuestras células. Por estas propiedades, es uno de los elementos fundamentales para la salud de todos los tejidos. Quienes hayan padecido o padezcan de enfermedades articulares deben consumir buenas cantidades de esta vitamina.
Algunos alimentos que contienen vitamina A son: aceite de bacalao, huevos, leche y sus derivados, el hígado, los riñones de res o pollo, pimientos, melón, tomate, brócoli, batatas, damascos, toronjas, zanahorias, calabaza y casi todas las verduras.
Vitamina C
Conocida por sus propiedades para fortalecer el sistema inmune, también colabora en la reparación y crecimiento de los tejidos de nuestro cuerpo. De igual manera, esta vitamina es fundamental para la producción de colágeno; una proteína que tiene como función la formación de tendones, venas, ligamentos y por supuesto los cartílagos.
La vitamina C es eliminada todos los días mediante la orina; por ello debemos asegurarnos de consumir diariamente alimentos que la contengan. Está contenida en la mayoría de las frutas y vegetales.
Las frutas que la contienen en mayor cantidad son: las cítricas, el melón, la papaya, mango, piña, bayas y guayabas. Mientras que los vegetales que la contienen a mayor grado son: papa, tomate, pimientos, calabaza, lechuga y brócoli.
Vitamina D
Es básica para la formación de los huesos y los cartílagos. De hecho, es fundamental para que todo el esqueleto absorba el calcio que requiere. Cuando no la consumimos en suficiente cantidad, corremos el riesgo de desarrollar enfermedades como la osteoporosis o la artrosis.
La forma más común de obtenerla, es mediante suplementos vitamínico; otra recomendación es tomar unas horas de sol; ya que el sol estimula la producción natural de la misma. La alimentación también es importante.
Algunos alimentos que contienen alta concentración de vitamina D son: el pescado, los ostiones, la margarina, los cereales, la leche y sus derivados.
Te recomendamos que si tienes antecedentes de sufrir de las articulaciones, o tienes predisposición genética para la artrosis o la osteoporosis, lleves una dieta balanceada, asegurándote de consumir los alimentos que te mencionamos, también toma algunos suplementos vitamínicos cada cierto tiempo. De esta manera, podrás prevenir el desgaste de los cartílagos y tendrás una mejor calidad de vida.