El plan blanco es un alimento muy consumido pero muchas veces quienes lo comen no están al tanto de los riesgos que conlleva para la salud. A continuación veremos cómo afecta a la salud para que puedas tomar conciencia y reducir su consumo.
El pan blanco aumenta las posibilidades de padecer obesidad debido a la naturaleza de sus hidratos de carbono. Según un estudio de la Universidad de Navarra (España) consumir dos rebanadas de pan blanco al día aumenta en un 40% el riesgo de padecer sobrepeso.
Por otra parte, la harina con la que se elabora el pan blanco está modificada mediante químicos blanqueadores no naturales. Por lo tanto, cuando comes pan blanco, también ingieres los tóxicos de su harina.
Además, es de destacar que durante su fabricación el pan blanco pierde nutrientes como:
- Ácidos grasos buenos insaturados (son altos en valor alimenticio)
- Vitamina E
- 50% del calcio
- 70% de fósforo
- 80% de hierro
- 98% de magnesio
- 75% de manganeso
- 50% de potasio
- 65% de cobre
Alternativas para sustituir el pan blanco
Una forma de evitar el pan blanco es reemplazándolo por pan integral ya que añadir una ración de este pan a cada comida sirve para cubrir las cantidades de hidratos de carbono recomendadas para una dieta saludable. Además cuenta con los siguientes beneficios:
-Es rico en fibra
-Actúa contra el estreñimiento
-Ayuda a evitar que suban los niveles de glucosa en la sangre
-Ayudar a prevenir el cáncer de colon
-Reduce el colesterol malo
-Detiene el proceso de envejecimiento de las células
Reduce el consumo de pan blanco y verás cómo mejora tu salud.